jueves, 21 de junio de 2012

Arboles de ciudad. II -Atentados contranatura-


Acacia

Algunas especies de acacias poseen un sistema de defensa que algunos biólogos consideran como único en el Reino Vegetal. En los conglomerados donde cada individuo se encuentra en contacto cercano con otro, si éste es abordado por un depredador de su follaje, la planta reacciona químicamente liberando sustancias que son de transferencia aérea y llegan a las otras plantas "dando la alarma"; de inmediato el resto de los ejemplares del conglomerado comienzan a segregar en sus hojas una sustancia tóxica -éstas cambian de color oscureciéndose- que es dañina en el contacto e ingestión y hasta mortal para el depredador animal .


Lastima que no les de por comer unas hojitas de acacias a aquellos que han diseñado los nichos para albergar a estos árboles; árboles que dependiendo de la especie de acacia que sean, pueden alcanzar entre 8 y 30 metros de altura











Interpretación humana de lo que seria un bosque de Acacias en la ciudad.





Otras perspectivas del bosque




Qué pensara el trozo de bronce del fondo.
Quizás: ¿ Por qué no me han puesto a la sombra?,
¿Esos cubos grises que han puesto a los pies de los árboles, son para que no se vayan?





Viandante observando el magestuoso porte de una acacia encapsulada.

En definitiva: árboles enjaulados








lunes, 18 de junio de 2012

"Hospital La Paz " paisajes de ciudad, proyecto chicles

 Hospital La Paz, zona de consultas externas.



 Plaza del hospital La Paz; maternidad y hospital infantil al fondo,


 El cubo de hormigón que aparece detrás, increíblemente es una papelera. ¿Cómo es posible que los chicles no hayan caído dentro?




 En toda la zona que ocupa el Hospital, se pueden contar por miles, los chicles pegados al pavimento; seguro que darán lugar a más entradas.


Mientras preparaba y montaba la instalación unos jóvenes se acercaron a preguntarme qué eran esas cosas, dos de ellos mascaban chicle con la mayor naturalidad; al explicarles que todas y cada una de las manchitas negras que poblaban el suelo eran restos de chicles, sus ojos se abrieron de tal forma, que pude ver hasta las uñas de los dedos de sus pies. Los mios tambien se abrieron al comprobar que la mayoría de los chavales no son conscientes de que esas manchas mugrientas, esos pequeños puntos, que se  extienden por el pavimento de todas las ciudades - al menos de las españolas- provienen de los chicles que ellos mascan. Bueno, al menos dos de ellos creo que no volveran a tirar los chicles al suelo.

Va por Anto y Esther PIEZASAMBOS

domingo, 10 de junio de 2012

Más madera, Atentados contranatura.

!!!Más madera, más madera, esto es la guerra!!! Seguramente este seria el grito de Harpo
- El mudo- al contemplar este hermoso ejemplar  arrancado para construir la autopista del Cantábrico.



 Se encuentra tirado a la salida de Andrín, a los pies de lo que según la vista de satélite es el campo de golf municipal de Llanes.


 Por ahora ambas cosas estan muertas, tanto el árbol, como la carretera, y parece que irá para rato según los tiempos que corren; por ello no entiendo la premura en acabar con el arbolito.

Recuerdo una calle en Londres, en la que habian tenido en cuenta para realizar su trazado, la existencia de un árbol,un árbol - sin menosprecio- bastante más pequeño que el de la foto, eso es amor por la naturaleza.


En definitiva, como apuntaba un jefe indio, cuando no quede ningún pez que pescar, ni animales que cazar , y todos los árboles talados, entonces y solo entonces el hombre blanco se dará cuenta de que el dinero no se come.